sábado, 8 de octubre de 2011

Las primeras impresiones...

Pues sí amigos, ya estamos aquí. En este momento, en el que me dejo caer por primera vez en el sofá de la que será mi casa durante nueves meses, siento que empiezo de verdad a vivir en San Salvador. La estancia en el hotel durante estos cinco días ha sido necesaria para poder encontrar una vivienda ajustada a nuestras expectativas, pero en un hotel te sientes más turista que ciudadano del país destino... por eso hoy tengo la sensación de que comienza de verdad esta aventura.

Esta mañana firmamos el contrato, hicimos copia de las llaves y, tras darle varias vueltas, contratamos internet con tigo (no con vosotros, lectores, sino con una compañía muy popular aquí llamada tigo). Como podéis imaginar aún no nos lo han instalado, pero estamos teniendo la suerte de tener un vecino generoso que nos está donando parte de su conexión para poder escribir este post.

El apartamento está genial. Es una urbanización privada en la zona noble de la ciudad, a dos minutos de mi lugar de trabajo los jueves y viernes (de lunes a miércoles tocará agarrar un carro para ir al Ministerio). Tienes tres habitaciones: una principal grande con cama de matrimonio, aire acondicionado, aseo propio, vistas al exterior y un gran ventanal... suena bien, ¿verdad? Pues no es la mía. La mía es más pequeñita y tiene vistas a un patio de luz, sin wc ni aire, pero tiene la ventaja de que si mi compañero me llama incluso susurrando puedo escucharlo perfectamente ya que sus paredes son de un material parecido al papel. Por todo lo anterior, creo que haré mucha vida en el salón. Como podéis imaginar, hemos estado todos de acuerdo en que la habitación lujosa la ocupe la señorita de la casa, que se llama Alba, y los dos señoritos, Nacho y un servidor, nos instalemos en las dos secundarias.

Mañana tocará dedicar el domingo a limpiar a fondo la casa. Hoy teóricamente ha estado una mujer aquí toda la mañana "limpiando" pero han debido poner el programa de Ana Rosa en la tele y se le ha pasado lo que es el tema de limpiar. Además, nos ha comentado el dueño que los anteriores inquilinos eran poco higiénicos (qué me gustan los eufemismos), así que se ha juntado el hambre con las ganas de comer y mañana nos dedicaremos a sacar la Juani que todos llevamos dentro y dejaremos esto como los chorros del oro, o no (como diría el Selu).

El apartamento por lo demás está genial. Tiene una piscinita en la azotea junto con un pequeño gimnasio y una zona para hacer asados (barbacoas). La zona en la que vamos a vivir es un claro ejemplo de las diferencias sociales que reinan en este país y, en general, en todos los países en vías de desarrollo.
Ya os puedo contar algunas cosas que me llaman mucho la atención. Por ejemplo, aquí todo el mundo es muy futbolero, pero no siguen la liga de su país, sino la española. Todo el mundo es barsa o real y se lo toman bastante en serio. De hecho, muchos autobuses de línea llevan en su parte de atrás grandes escudos de estos equipos. También me contó el corredor que ha mediado en el contrato de arrendamiento, Walter, que también hay seguidores del Sevilla y, según sus palabras textuales, hay seguidores "incluso del Betis". No entraré en más polémicas... jajaja!

Otra cuestión que me llama poderosamente la atención y que comentaré a lo largo de toda mi estancia aquí es la seguridad, o la no seguridad, dependiendo del caso. Mi urbanización la "protege" las 24 horas del día un vigilante con una metralleta que cuesta tragar saliva de sólo verla. Y así en discotecas, bares, o incluso jugueterías... Hay veces que ya cuando ves el personaje que sostiene la metralleta se te quita un poco el miedo, o quizá te entra un poco más... Ayer, al entrar en un pub, me cacheó un vigilante que tendría cerca de setenta años, delgaducho, y de apenas metro sesenta  y me dio incluso un poco de penilla... Hay 20.000 vigilantes privados en el país, tantos como policías. Me gustaría saber cuántos no saldrían corriendo en el momento en que vieran en peligro su integridad.

Tampoco quiero aburriros mucho más, porque además vamos a salir a cenar algo... el frigorífico de momento está "pelao" y habrá que salir a degustar la rica gastronomía salvadoreña. 

Sólo quiero para terminar acordarme de mi coro, que hace un par de días publicaron su nombre del año que viene... serán Bollywood y les deseo lo mejor. Los voy a echar muchos de menos. Por cierto, donde dije "serán" quise decir "seremos", porque sigue siendo mi coro, aunque sea un componente de El Salvador.

Pd.- Os dejo un par de fotos, una desayunando con Jordi en el hotel que dejamos hoy y otra con Nacho llegando a nuestro nuevo hogar.






Seguimos en contacto y comentad lo que queráis!!

7 comentarios:

  1. Hola! Como unos cuantos me habéis dicho que no podéis dejar comentarios éste mensaje es de prueba a ver qué pasa... Saludos!

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  2. felicidades joseja... que este dia sea especial alli, un beso y sigue contandonos cositas

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  3. Por fin puedo escribirteeeee!!!!!!!!!!!!!jajajajja
    Sigue escribiendo que a mi me tienes enganchá, me alegra de corazón que todo te vaya bien y estés contento en tu adaptación.A mi éso me alegra enormemente.
    Un beso de Lolo y kuky

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  4. Gracias Margui y Ana! Perdón por el retraso en contestaros!!

    Kuky!! Me alegro que sigas el blog y que te guste ;) Estoy muy contento y espero que vosotros también... a ver si me escribes un privadito y me cuentas cosas del coro, no? besos para los dos!!

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  5. Por fin he empezado a leer este blog tan maravilloso que estas escribiendo y personalmente, este comentario me ha encantado!!! que arte, con las paredes de papel, y las señoras de la limpieza viendo ana rosa...no solos los andaluces nos escaqueamos...un besillo!!Conchi Pérez

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  6. Nunca es tarde Conchita... jajaja!! Me alegro de que te guste, yo disfruto haciéndolo y si hay gente que le gusta leerlo, qué más puedo pedir!! Un beso y espero que estés ya curada de lo tuyo!!

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